LA AMISTAD

Por Sixyel Castañeda

A Jesucristo, mi amigo fiel, y a todos mis demás amigos

El hombre es un ser social, y por naturaleza él va a querer estar acompañado de otros y relacionarse con los demás, creando vínculos amistosos, amorosos, entre otros. Es por esto que resulta necesaria la adquisición de buenos amigos que nos  ayuden a que nuestra fe crezca y que nuestra vida cristiana eche raíces y esté cimentada sobre la Roca: Jesucristo. Miremos lo que decía el salmista:

“Compañero soy yo de todos los que te temen y guardan tus mandamientos.” 

Salmo 119:63

Este pensamiento nos ayuda a reflexionar sobre quiénes son nuestros verdaderos amigos. En mi opinión, un verdadero amigo es aquél que te ayuda a seguir en el camino de Dios, uno en el cual puedes tener siempre un consejo sabio, que te ayude en tiempos de necesidad. Pero más allá de esas ideas, te diré quién es tu mejor y verdadero amigo.

Jesús dijo: "Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando." Juan 15:13,14

Sí, Jesús es nuestro mejor amigo. Pero también es necesario que tengamos amigos aquí en la Tierra. Veamos ejemplos de algunas amistades en la Biblia:

•  David y Jonatán (1 Samuel 18:1)
• Jesús y sus apóstoles (Mateo 17:1)
• Job y sus tres amigos (Job 2:11)
• Rut y Noemí (Rut 1:16)

Mas allá de nosotros querer buenos amigos, nosotros debemos ser amigos de los demás. Recordemos las palabras de Jesús: "Y como queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos." Lucas 6:31

Antes de esperar que otros nos sean propicios, nosotros debemos amar a otros, que es el secreto de una verdadera amistad: el amor.

Finalizo compartiéndoles un versículos:

“En todo tiempo ama el amigo, Y es como un hermano en tiempo de angustia.”

Proverbios 17:17