Otro aspecto fundamental de ser escogido por Dios es que tenemos la oportunidad de adorarle. Pero nuestra adoración debe ser cómo lo dice nuestro Señor Jesucristo: "En espíritu y en verdad" porque esa clase de adoradores son los que Dios busca.
Nuestra adoración y entrega a Dios no debe ser forzada ni por obligación ya que es lo mínimo que podemos hacer por Él porque nuestro Señor es quien nos da todas las cosas, todos nuestros deseos y anhelos, hasta el punto de entregar a su Hijo en la cruz del calvario. Lo anterior nos motiva a darle a Dios lo mejor de nuestro tiempo, no aquel nos sobre. Debemos adorarle y bendecir su nombre.
Textos bíblicos para reflexionar:
• Deuteronomio 7:6
• Hageo 2:23
• Mateo 12:18
• Juan 4:23
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