Aquí esta el Bosquejo que utilizó el Pastor Ascanio Osorio en la prédica del 31 de Diciembre de 2010, EL AÑO SOBRENATURAL.
2011 EL AÑO DE LO SOBRENATURAL Que no sigue las reglas conocidas de la naturaleza o que supera sus límites. Lo sobrenatural ( del latín: super, supra "arriba" + natura, naturalis "naturaleza") es el término utilizado para definir algo que se tiene como por encima, que excede o está más allá de lo que se entiende como natural o que se cree existe fuera de las leyes de la naturaleza y el universo observable.1 La ciencia limita sus explicaciones.
1 Corintios 2:9 Antes bien, como está escrito:
Cosas que ojo no vio, ni oído oyó,
Ni han subido en corazón de hombre,
Son las que Dios ha preparado para los que le aman.
Eliseo fue el sucesor del profeta Elías en el reino del norte. El nombre Eliseo significa: "Dios es salvación". Vivía en el valle del Jordán, y pertenecía a una familia de buena posición económica; que laboraban en sus campos. Dios lo designó como sucesor de Elías, al encontrarlo tras el arado, Elías echó sobre él su manto. Eliseo comprendió el significado de este gesto simbólico. Volviendo a los suyos, ofreció un sacrificio y dio a su gente un festín de despedida, y después siguió a Elías y le sirvió. Elías, antes de ser arrebatado, cruzó el Jordán, y Eliseo rehusó separarse de él. Su ministerio profético comienza después del arrebatamiento de Elías.
Elías le dijo que pidiera lo que quisiera. Entonces Eliseo tuvo la sabiduría de solicitar una doble porción de la sabiduría de Elías. Vio cómo el carro de fuego arrebataba a su amo; tomó el manto que Elías había dejado caer, y con él golpeó el Jordán, el cual se abrió. Eliseo atravesó el río, y pasó a la ribera occidental 2 Reyes 2:1-18.
2:1 Aconteció que cuando quiso Jehová alzar a Elías en un torbellino al cielo, Elías venía con Eliseo de Gilgal.
Bet-el.
Jericó.
Jordán. Y él dijo: Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré. Fueron, pues, ambos.
Tomando entonces Elías su manto, lo dobló, y golpeó las aguas, las cuales se apartaron a uno y a otro lado, y pasaron ambos por lo seco.
2:9 Cuando habían pasado, Elías dijo a Eliseo: Pide lo que quieras que haga por ti, antes que yo sea quitado de ti. Y dijo Eliseo: Te ruego que una doble porción de tu espíritu sea sobre mí.
2:10 El le dijo: Cosa difícil has pedido. Y aconteció que yendo ellos y hablando, he aquí un carro de fuego con caballos de fuego apartó a los dos;
tomando el manto de Elías que se le había caído, golpeó las aguas, y dijo: ¿Dónde está Jehová, el Dios de Elías? Y así que hubo golpeado del mismo modo las aguas, se apartaron a uno y a otro lado, y pasó Eliseo.
Viéndole los hijos de los profetas que estaban en Jericó al otro lado, dijeron: El espíritu de Elías reposó sobre Eliseo. Una serie de hechos sobrenaturales marca la carrera de su ministerio: milagros de conocimiento, o milagros de poder, todos ellos cumplidos expresamente en nombre de Jehová.
Su ministerio.
De la misma manera que los milagros de Elías, los de Eliseo tenían el propósito de manifestar la autoridad del profeta y de presentar al Dios viviente. Este poder sobrenatural de Eliseo.
Veamos una serie de milagros o acontecimientos hechos por Eliseo.
BIENESTAR de VIVIENDA: En el nombre del Jehová: sanó con sal las aguas de la fuente de Jericó (2 Reyes 2:19-22).
2:19 Y los hombres de la ciudad dijeron a Eliseo: He aquí, el lugar en donde está colocada esta ciudad es bueno, como mi señor ve; mas las aguas son malas, y la tierra es estéril .Entonces él dijo: Traedme una vasija nueva, y poned en ella sal. Y se la trajeron. Y saliendo él a los manantiales de las aguas, echó dentro la sal, y dijo: Así ha dicho Jehová: Yo sané estas aguas, y no habrá más en ellas muerte ni enfermedad.
BIENESTAR ECONÓMICO: Multiplicó el aceite de una viuda (2 Reyes 4:1-7).
4:1 Una mujer, de las mujeres de los hijos de los profetas, clamó a Eliseo, diciendo: Tu siervo mi marido ha muerto; y tú sabes que tu siervo era temeroso de Jehová; y ha venido el acreedor para tomarse dos hijos míos por siervos.
4:2 Y Eliseo le dijo: ¿Qué te haré yo? Declárame qué tienes en casa. Y ella dijo: Tu sierva ninguna cosa tiene en casa, sino una vasija de aceite.
4:3 El le dijo: Ve y pide para ti vasijas prestadas de todos tus vecinos, vasijas vacías, no pocas.
4:4 Entra luego, y enciérrate tú y tus hijos; y echa en todas las vasijas, y cuando una esté llena, ponla aparte.
4:5 Y se fue la mujer, y cerró la puerta encerrándose ella y sus hijos; y ellos le traían las vasijas, y ella echaba del aceite.
4:6 Cuando las vasijas estuvieron llenas, dijo a un hijo suyo: Tráeme aún otras vasijas. Y él dijo: No hay más vasijas. Entonces cesó el aceite.
4:7 Vino ella luego, y lo contó al varón de Dios, el cual dijo: Ve y vende el aceite, y paga a tus acreedores; y tú y tus hijos vivid de lo que quede
BIENESTAR CONTRA EL HAMBRE: Él indicó un antídoto contra la planta venenosa que estaba en el alimento de los profetas (2 Reyes 4:38-41).
4:38 Eliseo volvió a Gilgal cuando había una grande hambre en la tierra. Y los hijos de los profetas estaban con él, por lo que dijo a su criado: Pon una olla grande, y haz potaje para los hijos de los profetas. Y salió uno al campo a recoger hierbas, y halló una como parra montés, y de ella llenó su falda de calabazas silvestres; y volvió, y las cortó en la olla del potaje, pues no sabía lo que era. Después sirvió para que comieran los hombres; pero sucedió que comiendo ellos de aquel guisado, gritaron diciendo: ¡Varón de Dios, hay muerte en esa olla! Y no lo pudieron comer.
El entonces dijo: Traed harina. Y la esparció en la olla, y dijo: Da de comer a la gente. Y no hubo más mal en la olla.
BIENESTAR DE PROSPERIDAD Y ABUNDANCIA: Durante una hambruna, el profeta alimentó a cien hombres con veinte panes de cebada y algunas espigas de trigo (2 Reyes 4:42-44).
4:42 Vino entonces un hombre de Baal-salisa, el cual trajo al varón de Dios panes de primicias, veinte panes de cebada, y trigo nuevo en su espiga. Y él dijo: Da a la gente para que coma.
4:43 Y respondió su sirviente: ¿Cómo pondré esto delante de cien hombres? Pero él volvió a decir: Da a la gente para que coma, porque así ha dicho Jehová: Comerán, y sobrará.
4:44 Entonces lo puso delante de ellos, y comieron, y les sobró, conforme a la palabra de Jehová espigas nuevas (2 Reyes 4:42-44).
BIENESTAR EN LA SALUD FÍSICA Y ESPIRITUAL: Ordenó a Naamán que se bañara en el Jordán para sanarse de la lepra (2 Reyes 5:1-19), y anunció a Gizei que esta lepra se quedaría pegada siempre a él debido a su codicia.
5:8 Cuando Eliseo el varón de Dios oyó que el rey de Israel había rasgado sus vestidos, envió a decir al rey: ¿Por qué has rasgado tus vestidos? Venga ahora a mí, y sabrá que hay profeta en Israel.
5:9 Y vino Naamán con sus caballos y con su carro, y se paró a las puertas de la casa de Eliseo.
5:10 Entonces Eliseo le envió un mensajero, diciendo: Vé y lávate siete veces en el Jordán, y tu carne se te restaurará, y serás limpio.
5:11 Y Naamán se fue enojado, diciendo: He aquí yo decía para mí: Saldrá él luego, y estando en pie invocará el nombre de Jehová su Dios, y alzará su mano y tocará el lugar, y sanará la lepra.
5:12 Abana y Farfar, ríos de Damasco, ¿no son mejores que todas las aguas de Israel? Si me lavare en ellos, ¿no seré también limpio? Y se volvió, y se fue enojado.
5:13 Más sus criados se le acercaron y le hablaron diciendo: Padre mío, si el profeta te mandara alguna gran cosa, ¿no la harías? ¿Cuánto más, diciéndote: Lávate, y serás limpio?
5:14 El entonces descendió, y se zambulló siete veces en el Jordán, conforme a la palabra del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio.
COSAS SOBRENATURALES HAREMOS: Un cadáver que había sido arrojado apresuradamente en la tumba de Eliseo volvió a la vida al tocar los huesos de Eliseo.
2 Reyes 13:20- 21. Leemos que después de muerto Eliseo, el pueblo de Israel estaba siendo avasallado por los madianitas, y seguramente iban los israelitas en corte fúnebre llevando este compatriota y vinieron los madianitas y los atacaron.
Tuvieron que huir arrojando al muerto en la tumba de Eliseo que posiblemente fue la que más a mano tenían. Lo más llamativo del caso fue que el muerto resucitó, la Biblia no nos dice su nombre pero sí que cuando entró en contacto con los huesos de Eliseo, revivió y se levantó sobre sus pies.
13:20 Y murió Eliseo, y lo sepultaron. Entrado el año, vinieron bandas armadas de moabitas a la tierra.
13:21 Y aconteció que al sepultar unos a un hombre, súbitamente vieron una banda armada, y arrojaron el cadáver en el sepulcro de Eliseo; y cuando llegó a tocar el muerto los huesos de Eliseo, revivió, y se levantó sobre sus pies.
¿Cómo pudo producirse esta reversión de las leyes naturales que gobiernan la vida y la muerte del ser humano?, ¿cómo puede ser que los huesos de un muerto al entrar en contacto con los de otro sean vivificados y la persona vuelva a la vida?, la respuesta es sencilla: Para Dios es sencillo revertir situaciones imposibles, alterar los procesos naturales, y normales, y producir así algún propósito definido cuando lo cree necesario.
El posee recursos infinitos, para cumplir sus propósitos, la clave no es tanto cómo lo hace, sino para qué lo hace.
Esa es la iglesia que Dios quiere, una iglesia con una mentalidad de poder.
Yo me dirijo a todos los hermanos en la fe que están viniendo a nuestra iglesia. Yo les digo que desde el principio se comprometan a adoptar esa mentalidad sobrenatural en sus vidas. No se formen en una mentalidad religiosa institucional. No coman de ese pan viejo que no tiene ningún nutriente dentro de él. Tenemos que beber de ese vino nuevo de la revelación del poder de Dios.
Por eso es que otro de los conceptos de la mentalidad sobrenatural es la necesidad de fe. Y la fe es un resultado de toda una serie de prácticas en nuestras vidas, que van aumentando.
Es como la salud espiritual del creyente, la fe. Como un niño que crece saludable porque se alimenta bien, tiene una buena vida familiar, recibe amor, hace ejercicio y todas estas cosas contribuyen a su vigor espiritual.
Asimismo el creyente de fe llega a esa postura de fe porque ha comido de esa Palabra, porque se ha mantenido en oración, porque se mantiene en comunión con otros hombres y mujeres de fe, porque participa de todas esas cosas que van contribuyendo para su fortalecimiento espiritual. La fe es el hilo conductor del poder de Dios.
Durante la hambruna del cerco de Samaria, predijo que al día siguiente los víveres serían abundantes y baratos, añadiendo que el oficial incrédulo, que se burló de esta profecía, lo vería pero no lo disfrutaría. Una multitud aplastó a este oficial, que murió ante la puerta de Samaria.
2 Reyes 7:1. Dijo entonces Eliseo: Oíd palabra de Jehová: Así dijo Jehová: Mañana a estas horas valdrá el seah de flor de harina un siclo, y dos seahs de cebada un siclo, a la puerta de Samaria.
7:2 Y un príncipe sobre cuyo brazo el rey se apoyaba, respondió al varón de Dios, y dijo: Si Jehová hiciese ahora ventanas en el cielo, ¿sería esto así? Y él dijo: He aquí tú lo verás con tus ojos, mas no comerás de ello.
7:3 Había a la entrada de la puerta cuatro hombres leprosos, los cuales dijeron el uno al otro: ¿Para qué nos estamos aquí hasta que muramos?
7:4 Si tratáremos de entrar en la ciudad, por el hambre que hay en la ciudad moriremos en ella; y si nos quedamos aquí, también moriremos. Vamos, pues, ahora, y pasemos al campamento de los sirios; si ellos nos dieren la vida, viviremos; y si nos dieren la muerte, moriremos.
Ellos pensaron en una forma muy cuerda. Han llegado al punto de la desesperación. No les importa si viven o mueren, de cualquier manera vamos a morir, entonces vamos a entrar en acción.
Hermanos, yo creo que los individuos que aprenden a pensar fuera de la caja, fuera de lo oficial, fuera de lo religioso, fuera de lo institucional, esas son las personas a quienes Dios les va a dar la estrategia para llevar a cabo su obra en este tiempo. Aquellos de nosotros que estemos dispuestos a adoptar una actitud de que si vivimos, vivimos y si morimos, morimos.
Esa fue la actitud de Ester, “si perezco, que perezca” pero yo voy a hacer algo, recuerdan. ¿Saben qué hermanos?, Dios no te puede usar hasta que tú no entregas tu vida, hasta que tú no adoptes una actitud de muerto aquí en la tierra. El Señor Jesucristo dijo “Si el grano de trigo no cae a tierra y muere, queda solo, es decir no da fruto”, ¿recuerdan? “Pero si muere lleva muchos frutos”.
Hasta que tú no entregas todo, tú no puedes recibir el todo de Dios y hasta que nosotros no nos hacemos pobres en nuestra humanidad orgullosa y autosuficiente, Dios no puede entrar con su nueva revelación, con su nuevo vino y llenarnos. Hay que vaciarse para recibir la unción de Dios en tu vida.
Yo creo que las iglesias están llenas de personas que están en la iglesia pero que la iglesia no está dentro de nosotros. Que no nos hemos vaciado de nuestro amor al mundo, a nuestro yo, a nuestra comodidad, o a nuestras posesiones materiales. Y todavía estamos como el grano de trigo, entero. Le decimos a Cristo <<quebrántame>>, pero estamos cerrados a la obra de Dios en la vida. Y hay todavía mucha gente que dice ´mi tiempo es mío´, ´mi dinero es mío´, ´mi familia es mía´, ´mi profesión es mía, ´mi descanso es mío´, ´mi novela es mía´, ´mi televisor es mío´, y cuando el Señor viene y nos pide estas cosas para entrarnos en una dimensión más profunda de su gloria le decimos: “no Señor, ahí tú no puedes entrar porque eso es demasiado precioso para mí” y hasta que nosotros no llegamos al punto en que le hemos dado todos los títulos de propiedad a Dios y Él es quien los tiene en su Reino, no podemos ver la gloria de Dios en nuestra vida. Hasta que no llegamos a la posición de estos leprosos que no tenían nada que dar, no tenían nada que perder, no tenían nada que defender porque lo habían perdido todo ya, no podremos ver la gloria de Dios. Por eso es que estos leprosos están en esa posición estratégica en ser los primeros que detectan que la situación ha cambiado radicalmente.
En realidad, lo que más me interesó a mí de este pasaje es lo siguiente, la situación ha cambiado y nadie se da cuenta. Los sirios habían sido derrotados, habían huido. El pueblo estaba libre para moverse y, sin embargo, todo el mundo en Samaria estaba con una perspectiva de que todavía estaban cercados y estaban asediados por el rey de Siria. La realidad ha cambiado, pero no hay discernimiento para entender ese cambio radical en el pueblo.
La impresión más grande en este último tiempo en mi vida es que la realidad de esta nación ha cambiado. En medio de una situación que parece terrible allá afuera, y no nos damos cuenta de que Dios nos ha entregado al Enemigo en nuestras manos y tenemos que darnos cuenta de eso. Leamos lo que dice en la Palabra:
7:5 Se levantaron, pues, al anochecer, para ir al campamento de los sirios; y llegando a la entrada del campamento de los sirios, no había allí nadie.
7:6 Porque Jehová había hecho que en el campamento de los sirios se oyese estruendo de carros, ruido de caballos, y estrépito de gran ejército; y se dijeron unos a otros: He aquí, el rey de Israel ha tomado a sueldo contra nosotros a los reyes de los heteos y a los reyes de los egipcios, para que vengan contra nosotros.
7:7 Y así se levantaron y huyeron al anochecer, abandonando sus tiendas, sus caballos, sus asnos, y el campamento como estaba; y habían huido para salvar sus vidas.
7:8 Cuando los leprosos llegaron a la entrada del campamento, entraron en una tienda y comieron y bebieron, y tomaron de allí plata y oro y vestidos, y fueron y lo escondieron; y vueltos, entraron en otra tienda, y de allí también tomaron, y fueron y lo escondieron.
Yo le digo a este pueblo: hermanos atrevámonos a predicar el evangelio a nuestros amigos, a nuestros vecinos, a nuestros familiares, porque la unción de Dios está en nosotros para traer a la gente a la iglesia. Dios quiere que tú te atrevas a hacer cosas raras y atrevidas en tu vida creyendo que Dios las va a honrar y las va a bendecir, cada uno de ustedes, hermanos.
Comience a orar por la gente para sanidad. Comience a atreverse a evangelizar a otros e invitarlos a la iglesia. Comience a dar atrevidamente, creyendo que Dios le va a bendecir y le va a honrar. Comience a hablar en fe que Dios va a cambiar su situación familiar, o emocional o financiera, o de empleo o de vivienda.
Dios puede cambiar todas esas cosas. Comience a obrar, a hablar y a moverse con fe en el espíritu y crea que Dios va a respaldar su vida y va a llenar de Su unción su vida, porque Dios ha derrotado al enemigo como hizo con el ejército sirio, y Dios nos ha entregado toda la tierra que pise la planta de nuestros pies. En este tiempo nosotros vamos a ver la gloria de Dios manifestada, la vamos a ver como nunca antes en la Historia. Y Dios nos dice: preparemos nuestros corazones y nuestras vidas, porque Él va a hacer cosas que van a llamar la atención de todo el mundo. No miremos a las circunstancias, comencemos a discernir la realidad como Dios la ve, no como la ve la gente corriente. Llenémonos del Espíritu Santo.
Adoptemos una mentalidad violenta como la de los leprosos y tomemos acción, diciendo “bueno, si morimos, que muramos” pero vamos a hacer algo. Despojémonos de todo interés personal de comodidad o de defensa de nuestros propios intereses y entreguémoselo todo al Señor y entonces veremos como Él nos devuelve todo con creces.
7:9 Luego se dijeron el uno al otro: No estamos haciendo bien. Hoy es día de buena nueva, y nosotros callamos; y si esperamos hasta el amanecer, nos alcanzará nuestra maldad. Vamos pues, ahora, entremos y demos la nueva en casa del rey.
7:10 Vinieron, pues, y gritaron a los guardas de la puerta de la ciudad, y les declararon, diciendo: Nosotros fuimos al campamento de los sirios, y he aquí que no había allí nadie, ni voz de hombre, sino caballos atados, asnos también atados, y el campamento intacto.
7:15 Y ellos fueron, y los siguieron hasta el Jordán; y he aquí que todo el camino estaba lleno de vestidos y enseres que los sirios habían arrojado por la premura. Y volvieron los mensajeros y lo hicieron saber al rey.
7:16 Entonces el pueblo salió, y saqueó el campamento de los sirios. Y fue vendido un seah de flor de harina por un siclo, y dos seahs de cebada por un siclo, conforme a la palabra de Jehová.
7:17 Y el rey puso a la puerta a aquel príncipe sobre cuyo brazo él se apoyaba; y lo atropelló el pueblo a la entrada, y murió, conforme a lo que había dicho el varón de Dios, cuando el rey descendió a él.
PASTOR
Elías le dijo que pidiera lo que quisiera. Entonces Eliseo tuvo la sabiduría de solicitar una doble porción de la sabiduría de Elías. Vio cómo el carro de fuego arrebataba a su amo; tomó el manto que Elías había dejado caer, y con él golpeó el Jordán, el cual se abrió. Eliseo atravesó el río, y pasó a la ribera occidental 2 Reyes 2:1-18.
2:1 Aconteció que cuando quiso Jehová alzar a Elías en un torbellino al cielo, Elías venía con Eliseo de Gilgal.
Bet-el.
Jericó.
Jordán. Y él dijo: Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré. Fueron, pues, ambos.
Tomando entonces Elías su manto, lo dobló, y golpeó las aguas, las cuales se apartaron a uno y a otro lado, y pasaron ambos por lo seco.
2:9 Cuando habían pasado, Elías dijo a Eliseo: Pide lo que quieras que haga por ti, antes que yo sea quitado de ti. Y dijo Eliseo: Te ruego que una doble porción de tu espíritu sea sobre mí.
2:10 El le dijo: Cosa difícil has pedido. Y aconteció que yendo ellos y hablando, he aquí un carro de fuego con caballos de fuego apartó a los dos;
tomando el manto de Elías que se le había caído, golpeó las aguas, y dijo: ¿Dónde está Jehová, el Dios de Elías? Y así que hubo golpeado del mismo modo las aguas, se apartaron a uno y a otro lado, y pasó Eliseo.
Viéndole los hijos de los profetas que estaban en Jericó al otro lado, dijeron: El espíritu de Elías reposó sobre Eliseo. Una serie de hechos sobrenaturales marca la carrera de su ministerio: milagros de conocimiento, o milagros de poder, todos ellos cumplidos expresamente en nombre de Jehová.
Su ministerio.
De la misma manera que los milagros de Elías, los de Eliseo tenían el propósito de manifestar la autoridad del profeta y de presentar al Dios viviente. Este poder sobrenatural de Eliseo.
Veamos una serie de milagros o acontecimientos hechos por Eliseo.
BIENESTAR de VIVIENDA: En el nombre del Jehová: sanó con sal las aguas de la fuente de Jericó (2 Reyes 2:19-22).
2:19 Y los hombres de la ciudad dijeron a Eliseo: He aquí, el lugar en donde está colocada esta ciudad es bueno, como mi señor ve; mas las aguas son malas, y la tierra es estéril .Entonces él dijo: Traedme una vasija nueva, y poned en ella sal. Y se la trajeron. Y saliendo él a los manantiales de las aguas, echó dentro la sal, y dijo: Así ha dicho Jehová: Yo sané estas aguas, y no habrá más en ellas muerte ni enfermedad.
BIENESTAR ECONÓMICO: Multiplicó el aceite de una viuda (2 Reyes 4:1-7).
4:1 Una mujer, de las mujeres de los hijos de los profetas, clamó a Eliseo, diciendo: Tu siervo mi marido ha muerto; y tú sabes que tu siervo era temeroso de Jehová; y ha venido el acreedor para tomarse dos hijos míos por siervos.
4:2 Y Eliseo le dijo: ¿Qué te haré yo? Declárame qué tienes en casa. Y ella dijo: Tu sierva ninguna cosa tiene en casa, sino una vasija de aceite.
4:3 El le dijo: Ve y pide para ti vasijas prestadas de todos tus vecinos, vasijas vacías, no pocas.
4:4 Entra luego, y enciérrate tú y tus hijos; y echa en todas las vasijas, y cuando una esté llena, ponla aparte.
4:5 Y se fue la mujer, y cerró la puerta encerrándose ella y sus hijos; y ellos le traían las vasijas, y ella echaba del aceite.
4:6 Cuando las vasijas estuvieron llenas, dijo a un hijo suyo: Tráeme aún otras vasijas. Y él dijo: No hay más vasijas. Entonces cesó el aceite.
4:7 Vino ella luego, y lo contó al varón de Dios, el cual dijo: Ve y vende el aceite, y paga a tus acreedores; y tú y tus hijos vivid de lo que quede
BIENESTAR CONTRA LA ESTERILIDAD: Anunció el nacimiento de un hijo a una sunamitaEliseo lo revivió.
4:14 Y él dijo: ¿Qué, pues, haremos por ella? Y Giezi respondió: He aquí que ella no tiene hijo, y su marido es viejo.
4:15 Dijo entonces: Llámala. Y él la llamó, y ella se paró a la puerta.
4:16 Y él le dijo: El año que viene, por este tiempo, abrazarás un hijo. Y ella dijo: No, señor mío, varón de Dios, no hagas burla de tu sierva.
4:17 Mas la mujer concibió, y dio a luz un hijo el año siguiente, en el tiempo que Eliseo le había dicho.
4:18 Y el niño creció. Pero aconteció un día, que vino a su padre, que estaba con los segadores;
4:19 y dijo a su padre: ¡Ay, mi cabeza, mi cabeza! Y el padre dijo a un criado: Llévalo a su madre.
4:20 Y habiéndole él tomado y traído a su madre, estuvo sentado en sus rodillas hasta el mediodía, y murió.
4:25 Partió, pues, y vino al varón de Dios, al monte Carmelo. Y cuando el varón de Dios la vio de lejos, dijo a su criado Giezi: He aquí la sunamita.
4:26 Te ruego que vayas ahora corriendo a recibirla, y le digas: ¿Te va bien a ti? ¿Les va bien a tu marido, y a tu hijo? Y ella dijo: Bien.
4:32 Y venido Eliseo a la casa, he aquí que el niño estaba muerto tendido sobre su cama.
4:33 Entrando él entonces, cerró la puerta tras ambos, y oró a Jehová.
4:34 Después subió y se tendió sobre el niño, poniendo su boca sobre la boca de él, y sus ojos sobre sus ojos, y sus manos sobre las manos suyas; así se tendió sobre él, y el cuerpo del niño entró en calor.
4:14 Y él dijo: ¿Qué, pues, haremos por ella? Y Giezi respondió: He aquí que ella no tiene hijo, y su marido es viejo.
4:15 Dijo entonces: Llámala. Y él la llamó, y ella se paró a la puerta.
4:16 Y él le dijo: El año que viene, por este tiempo, abrazarás un hijo. Y ella dijo: No, señor mío, varón de Dios, no hagas burla de tu sierva.
4:17 Mas la mujer concibió, y dio a luz un hijo el año siguiente, en el tiempo que Eliseo le había dicho.
4:18 Y el niño creció. Pero aconteció un día, que vino a su padre, que estaba con los segadores;
4:19 y dijo a su padre: ¡Ay, mi cabeza, mi cabeza! Y el padre dijo a un criado: Llévalo a su madre.
4:20 Y habiéndole él tomado y traído a su madre, estuvo sentado en sus rodillas hasta el mediodía, y murió.
4:25 Partió, pues, y vino al varón de Dios, al monte Carmelo. Y cuando el varón de Dios la vio de lejos, dijo a su criado Giezi: He aquí la sunamita.
4:26 Te ruego que vayas ahora corriendo a recibirla, y le digas: ¿Te va bien a ti? ¿Les va bien a tu marido, y a tu hijo? Y ella dijo: Bien.
4:32 Y venido Eliseo a la casa, he aquí que el niño estaba muerto tendido sobre su cama.
4:33 Entrando él entonces, cerró la puerta tras ambos, y oró a Jehová.
4:34 Después subió y se tendió sobre el niño, poniendo su boca sobre la boca de él, y sus ojos sobre sus ojos, y sus manos sobre las manos suyas; así se tendió sobre él, y el cuerpo del niño entró en calor.
BIENESTAR CONTRA EL HAMBRE: Él indicó un antídoto contra la planta venenosa que estaba en el alimento de los profetas (2 Reyes 4:38-41).
4:38 Eliseo volvió a Gilgal cuando había una grande hambre en la tierra. Y los hijos de los profetas estaban con él, por lo que dijo a su criado: Pon una olla grande, y haz potaje para los hijos de los profetas. Y salió uno al campo a recoger hierbas, y halló una como parra montés, y de ella llenó su falda de calabazas silvestres; y volvió, y las cortó en la olla del potaje, pues no sabía lo que era. Después sirvió para que comieran los hombres; pero sucedió que comiendo ellos de aquel guisado, gritaron diciendo: ¡Varón de Dios, hay muerte en esa olla! Y no lo pudieron comer.
El entonces dijo: Traed harina. Y la esparció en la olla, y dijo: Da de comer a la gente. Y no hubo más mal en la olla.
BIENESTAR DE PROSPERIDAD Y ABUNDANCIA: Durante una hambruna, el profeta alimentó a cien hombres con veinte panes de cebada y algunas espigas de trigo (2 Reyes 4:42-44).
4:42 Vino entonces un hombre de Baal-salisa, el cual trajo al varón de Dios panes de primicias, veinte panes de cebada, y trigo nuevo en su espiga. Y él dijo: Da a la gente para que coma.
4:43 Y respondió su sirviente: ¿Cómo pondré esto delante de cien hombres? Pero él volvió a decir: Da a la gente para que coma, porque así ha dicho Jehová: Comerán, y sobrará.
4:44 Entonces lo puso delante de ellos, y comieron, y les sobró, conforme a la palabra de Jehová espigas nuevas (2 Reyes 4:42-44).
BIENESTAR EN LA SALUD FÍSICA Y ESPIRITUAL: Ordenó a Naamán que se bañara en el Jordán para sanarse de la lepra (2 Reyes 5:1-19), y anunció a Gizei que esta lepra se quedaría pegada siempre a él debido a su codicia.
5:8 Cuando Eliseo el varón de Dios oyó que el rey de Israel había rasgado sus vestidos, envió a decir al rey: ¿Por qué has rasgado tus vestidos? Venga ahora a mí, y sabrá que hay profeta en Israel.
5:9 Y vino Naamán con sus caballos y con su carro, y se paró a las puertas de la casa de Eliseo.
5:10 Entonces Eliseo le envió un mensajero, diciendo: Vé y lávate siete veces en el Jordán, y tu carne se te restaurará, y serás limpio.
5:11 Y Naamán se fue enojado, diciendo: He aquí yo decía para mí: Saldrá él luego, y estando en pie invocará el nombre de Jehová su Dios, y alzará su mano y tocará el lugar, y sanará la lepra.
5:12 Abana y Farfar, ríos de Damasco, ¿no son mejores que todas las aguas de Israel? Si me lavare en ellos, ¿no seré también limpio? Y se volvió, y se fue enojado.
5:13 Más sus criados se le acercaron y le hablaron diciendo: Padre mío, si el profeta te mandara alguna gran cosa, ¿no la harías? ¿Cuánto más, diciéndote: Lávate, y serás limpio?
5:14 El entonces descendió, y se zambulló siete veces en el Jordán, conforme a la palabra del varón de Dios; y su carne se volvió como la carne de un niño, y quedó limpio.
BIENESTAR ECONÓMICO: NO PRESTAREMOS MÁS: Hizo flotar a la superficie del Jordán el hierro (hacha) que había caído al río (2 Reyes 6:1-7).
6:1 Los hijos de los profetas dijeron a Eliseo: He aquí, el lugar en que moramos contigo nos es estrecho.
6:2 Vamos ahora al Jordán, y tomemos de allí cada uno una viga, y hagamos allí lugar en que habitemos. Y él dijo: Andad.
6:3 Y dijo uno: Te rogamos que vengas con tus siervos. Y él respondió: Yo iré.
6:4 Se fue, pues, con ellos; y cuando llegaron al Jordán, cortaron la madera.
6:5 Y aconteció que mientras uno derribaba un árbol, se le cayó el hacha en el agua; y gritó diciendo: ¡Ah, señor mío, era prestada!
6:6 El varón de Dios preguntó: ¿Dónde cayó? Y él le mostró el lugar. Entonces cortó él un palo, y lo echó allí; e hizo flotar el hierro.
6:7 Y dijo: Tómalo. Y él extendió la mano, y lo tomó.
Bienestar contra tus Enemigos
En respuesta a la oración de Eliseo, el Señor abrió los ojos de su siervo para que viera los carros y caballos de fuego que los protegían 2 Reyes 6:13-17.
6:13 Y él dijo: Id, y mirad dónde está, para que yo envíe a prenderlo. Y le fue dicho: He aquí que él está en Dotán.
6:14 Entonces envió el rey allá gente de a caballo, y carros, y un gran ejército, los cuales vinieron de noche, y sitiaron la ciudad.
6:15 Y se levantó de mañana y salió el que servía al varón de Dios, y he aquí el ejército que tenía sitiada la ciudad, con gente de a caballo y carros. Entonces su criado le dijo: ¡Ah, señor mío! ¿qué haremos?
6:16 El le dijo: No tengas miedo, porque más son los que están con nosotros que los que están con ellos.
6:17 Y oró Eliseo, y dijo: Te ruego, oh Jehová, que abras sus ojos para que vea. Entonces Jehová abrió los ojos del criado, y miró; y he aquí que el monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros de fuego alrededor de Eliseo.
6:1 Los hijos de los profetas dijeron a Eliseo: He aquí, el lugar en que moramos contigo nos es estrecho.
6:2 Vamos ahora al Jordán, y tomemos de allí cada uno una viga, y hagamos allí lugar en que habitemos. Y él dijo: Andad.
6:3 Y dijo uno: Te rogamos que vengas con tus siervos. Y él respondió: Yo iré.
6:4 Se fue, pues, con ellos; y cuando llegaron al Jordán, cortaron la madera.
6:5 Y aconteció que mientras uno derribaba un árbol, se le cayó el hacha en el agua; y gritó diciendo: ¡Ah, señor mío, era prestada!
6:6 El varón de Dios preguntó: ¿Dónde cayó? Y él le mostró el lugar. Entonces cortó él un palo, y lo echó allí; e hizo flotar el hierro.
6:7 Y dijo: Tómalo. Y él extendió la mano, y lo tomó.
Bienestar contra tus Enemigos
En respuesta a la oración de Eliseo, el Señor abrió los ojos de su siervo para que viera los carros y caballos de fuego que los protegían 2 Reyes 6:13-17.
6:13 Y él dijo: Id, y mirad dónde está, para que yo envíe a prenderlo. Y le fue dicho: He aquí que él está en Dotán.
6:14 Entonces envió el rey allá gente de a caballo, y carros, y un gran ejército, los cuales vinieron de noche, y sitiaron la ciudad.
6:15 Y se levantó de mañana y salió el que servía al varón de Dios, y he aquí el ejército que tenía sitiada la ciudad, con gente de a caballo y carros. Entonces su criado le dijo: ¡Ah, señor mío! ¿qué haremos?
6:16 El le dijo: No tengas miedo, porque más son los que están con nosotros que los que están con ellos.
6:17 Y oró Eliseo, y dijo: Te ruego, oh Jehová, que abras sus ojos para que vea. Entonces Jehová abrió los ojos del criado, y miró; y he aquí que el monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros de fuego alrededor de Eliseo.
COSAS SOBRENATURALES HAREMOS: Un cadáver que había sido arrojado apresuradamente en la tumba de Eliseo volvió a la vida al tocar los huesos de Eliseo.
2 Reyes 13:20- 21. Leemos que después de muerto Eliseo, el pueblo de Israel estaba siendo avasallado por los madianitas, y seguramente iban los israelitas en corte fúnebre llevando este compatriota y vinieron los madianitas y los atacaron.
Tuvieron que huir arrojando al muerto en la tumba de Eliseo que posiblemente fue la que más a mano tenían. Lo más llamativo del caso fue que el muerto resucitó, la Biblia no nos dice su nombre pero sí que cuando entró en contacto con los huesos de Eliseo, revivió y se levantó sobre sus pies.
13:20 Y murió Eliseo, y lo sepultaron. Entrado el año, vinieron bandas armadas de moabitas a la tierra.
13:21 Y aconteció que al sepultar unos a un hombre, súbitamente vieron una banda armada, y arrojaron el cadáver en el sepulcro de Eliseo; y cuando llegó a tocar el muerto los huesos de Eliseo, revivió, y se levantó sobre sus pies.
¿Cómo pudo producirse esta reversión de las leyes naturales que gobiernan la vida y la muerte del ser humano?, ¿cómo puede ser que los huesos de un muerto al entrar en contacto con los de otro sean vivificados y la persona vuelva a la vida?, la respuesta es sencilla: Para Dios es sencillo revertir situaciones imposibles, alterar los procesos naturales, y normales, y producir así algún propósito definido cuando lo cree necesario.
El posee recursos infinitos, para cumplir sus propósitos, la clave no es tanto cómo lo hace, sino para qué lo hace.
Esa es la iglesia que Dios quiere, una iglesia con una mentalidad de poder.
Yo me dirijo a todos los hermanos en la fe que están viniendo a nuestra iglesia. Yo les digo que desde el principio se comprometan a adoptar esa mentalidad sobrenatural en sus vidas. No se formen en una mentalidad religiosa institucional. No coman de ese pan viejo que no tiene ningún nutriente dentro de él. Tenemos que beber de ese vino nuevo de la revelación del poder de Dios.
Por eso es que otro de los conceptos de la mentalidad sobrenatural es la necesidad de fe. Y la fe es un resultado de toda una serie de prácticas en nuestras vidas, que van aumentando.
Es como la salud espiritual del creyente, la fe. Como un niño que crece saludable porque se alimenta bien, tiene una buena vida familiar, recibe amor, hace ejercicio y todas estas cosas contribuyen a su vigor espiritual.
Asimismo el creyente de fe llega a esa postura de fe porque ha comido de esa Palabra, porque se ha mantenido en oración, porque se mantiene en comunión con otros hombres y mujeres de fe, porque participa de todas esas cosas que van contribuyendo para su fortalecimiento espiritual. La fe es el hilo conductor del poder de Dios.
Durante la hambruna del cerco de Samaria, predijo que al día siguiente los víveres serían abundantes y baratos, añadiendo que el oficial incrédulo, que se burló de esta profecía, lo vería pero no lo disfrutaría. Una multitud aplastó a este oficial, que murió ante la puerta de Samaria.
2 Reyes 7:1. Dijo entonces Eliseo: Oíd palabra de Jehová: Así dijo Jehová: Mañana a estas horas valdrá el seah de flor de harina un siclo, y dos seahs de cebada un siclo, a la puerta de Samaria.
7:2 Y un príncipe sobre cuyo brazo el rey se apoyaba, respondió al varón de Dios, y dijo: Si Jehová hiciese ahora ventanas en el cielo, ¿sería esto así? Y él dijo: He aquí tú lo verás con tus ojos, mas no comerás de ello.
7:3 Había a la entrada de la puerta cuatro hombres leprosos, los cuales dijeron el uno al otro: ¿Para qué nos estamos aquí hasta que muramos?
7:4 Si tratáremos de entrar en la ciudad, por el hambre que hay en la ciudad moriremos en ella; y si nos quedamos aquí, también moriremos. Vamos, pues, ahora, y pasemos al campamento de los sirios; si ellos nos dieren la vida, viviremos; y si nos dieren la muerte, moriremos.
Ellos pensaron en una forma muy cuerda. Han llegado al punto de la desesperación. No les importa si viven o mueren, de cualquier manera vamos a morir, entonces vamos a entrar en acción.
Hermanos, yo creo que los individuos que aprenden a pensar fuera de la caja, fuera de lo oficial, fuera de lo religioso, fuera de lo institucional, esas son las personas a quienes Dios les va a dar la estrategia para llevar a cabo su obra en este tiempo. Aquellos de nosotros que estemos dispuestos a adoptar una actitud de que si vivimos, vivimos y si morimos, morimos.
Esa fue la actitud de Ester, “si perezco, que perezca” pero yo voy a hacer algo, recuerdan. ¿Saben qué hermanos?, Dios no te puede usar hasta que tú no entregas tu vida, hasta que tú no adoptes una actitud de muerto aquí en la tierra. El Señor Jesucristo dijo “Si el grano de trigo no cae a tierra y muere, queda solo, es decir no da fruto”, ¿recuerdan? “Pero si muere lleva muchos frutos”.
Hasta que tú no entregas todo, tú no puedes recibir el todo de Dios y hasta que nosotros no nos hacemos pobres en nuestra humanidad orgullosa y autosuficiente, Dios no puede entrar con su nueva revelación, con su nuevo vino y llenarnos. Hay que vaciarse para recibir la unción de Dios en tu vida.
Yo creo que las iglesias están llenas de personas que están en la iglesia pero que la iglesia no está dentro de nosotros. Que no nos hemos vaciado de nuestro amor al mundo, a nuestro yo, a nuestra comodidad, o a nuestras posesiones materiales. Y todavía estamos como el grano de trigo, entero. Le decimos a Cristo <<quebrántame>>, pero estamos cerrados a la obra de Dios en la vida. Y hay todavía mucha gente que dice ´mi tiempo es mío´, ´mi dinero es mío´, ´mi familia es mía´, ´mi profesión es mía, ´mi descanso es mío´, ´mi novela es mía´, ´mi televisor es mío´, y cuando el Señor viene y nos pide estas cosas para entrarnos en una dimensión más profunda de su gloria le decimos: “no Señor, ahí tú no puedes entrar porque eso es demasiado precioso para mí” y hasta que nosotros no llegamos al punto en que le hemos dado todos los títulos de propiedad a Dios y Él es quien los tiene en su Reino, no podemos ver la gloria de Dios en nuestra vida. Hasta que no llegamos a la posición de estos leprosos que no tenían nada que dar, no tenían nada que perder, no tenían nada que defender porque lo habían perdido todo ya, no podremos ver la gloria de Dios. Por eso es que estos leprosos están en esa posición estratégica en ser los primeros que detectan que la situación ha cambiado radicalmente.
En realidad, lo que más me interesó a mí de este pasaje es lo siguiente, la situación ha cambiado y nadie se da cuenta. Los sirios habían sido derrotados, habían huido. El pueblo estaba libre para moverse y, sin embargo, todo el mundo en Samaria estaba con una perspectiva de que todavía estaban cercados y estaban asediados por el rey de Siria. La realidad ha cambiado, pero no hay discernimiento para entender ese cambio radical en el pueblo.
La impresión más grande en este último tiempo en mi vida es que la realidad de esta nación ha cambiado. En medio de una situación que parece terrible allá afuera, y no nos damos cuenta de que Dios nos ha entregado al Enemigo en nuestras manos y tenemos que darnos cuenta de eso. Leamos lo que dice en la Palabra:
7:5 Se levantaron, pues, al anochecer, para ir al campamento de los sirios; y llegando a la entrada del campamento de los sirios, no había allí nadie.
7:6 Porque Jehová había hecho que en el campamento de los sirios se oyese estruendo de carros, ruido de caballos, y estrépito de gran ejército; y se dijeron unos a otros: He aquí, el rey de Israel ha tomado a sueldo contra nosotros a los reyes de los heteos y a los reyes de los egipcios, para que vengan contra nosotros.
7:7 Y así se levantaron y huyeron al anochecer, abandonando sus tiendas, sus caballos, sus asnos, y el campamento como estaba; y habían huido para salvar sus vidas.
7:8 Cuando los leprosos llegaron a la entrada del campamento, entraron en una tienda y comieron y bebieron, y tomaron de allí plata y oro y vestidos, y fueron y lo escondieron; y vueltos, entraron en otra tienda, y de allí también tomaron, y fueron y lo escondieron.
Yo le digo a este pueblo: hermanos atrevámonos a predicar el evangelio a nuestros amigos, a nuestros vecinos, a nuestros familiares, porque la unción de Dios está en nosotros para traer a la gente a la iglesia. Dios quiere que tú te atrevas a hacer cosas raras y atrevidas en tu vida creyendo que Dios las va a honrar y las va a bendecir, cada uno de ustedes, hermanos.
Comience a orar por la gente para sanidad. Comience a atreverse a evangelizar a otros e invitarlos a la iglesia. Comience a dar atrevidamente, creyendo que Dios le va a bendecir y le va a honrar. Comience a hablar en fe que Dios va a cambiar su situación familiar, o emocional o financiera, o de empleo o de vivienda.
Dios puede cambiar todas esas cosas. Comience a obrar, a hablar y a moverse con fe en el espíritu y crea que Dios va a respaldar su vida y va a llenar de Su unción su vida, porque Dios ha derrotado al enemigo como hizo con el ejército sirio, y Dios nos ha entregado toda la tierra que pise la planta de nuestros pies. En este tiempo nosotros vamos a ver la gloria de Dios manifestada, la vamos a ver como nunca antes en la Historia. Y Dios nos dice: preparemos nuestros corazones y nuestras vidas, porque Él va a hacer cosas que van a llamar la atención de todo el mundo. No miremos a las circunstancias, comencemos a discernir la realidad como Dios la ve, no como la ve la gente corriente. Llenémonos del Espíritu Santo.
Adoptemos una mentalidad violenta como la de los leprosos y tomemos acción, diciendo “bueno, si morimos, que muramos” pero vamos a hacer algo. Despojémonos de todo interés personal de comodidad o de defensa de nuestros propios intereses y entreguémoselo todo al Señor y entonces veremos como Él nos devuelve todo con creces.
7:9 Luego se dijeron el uno al otro: No estamos haciendo bien. Hoy es día de buena nueva, y nosotros callamos; y si esperamos hasta el amanecer, nos alcanzará nuestra maldad. Vamos pues, ahora, entremos y demos la nueva en casa del rey.
7:10 Vinieron, pues, y gritaron a los guardas de la puerta de la ciudad, y les declararon, diciendo: Nosotros fuimos al campamento de los sirios, y he aquí que no había allí nadie, ni voz de hombre, sino caballos atados, asnos también atados, y el campamento intacto.
7:15 Y ellos fueron, y los siguieron hasta el Jordán; y he aquí que todo el camino estaba lleno de vestidos y enseres que los sirios habían arrojado por la premura. Y volvieron los mensajeros y lo hicieron saber al rey.
7:16 Entonces el pueblo salió, y saqueó el campamento de los sirios. Y fue vendido un seah de flor de harina por un siclo, y dos seahs de cebada por un siclo, conforme a la palabra de Jehová.
7:17 Y el rey puso a la puerta a aquel príncipe sobre cuyo brazo él se apoyaba; y lo atropelló el pueblo a la entrada, y murió, conforme a lo que había dicho el varón de Dios, cuando el rey descendió a él.
Dios quiere que su pueblo adopte una mentalidad sobrenatural.
Porque si hay un libro en la Escritura que ejemplifica una iglesia viviendo al filo de lo sobrenatural es el libro de los Hechos. Entonces, al nosotros leer el libro de los Hechos y ver cómo esta gente enfrentaba la vida cuando venían situaciones, entendemos que el escritor Lucas era un hombre lleno del Espíritu Santo. Su mentalidad era una mentalidad sobrenatural por la manera como nos lo transmitió en sus escritos. Otra cosa bien importante es que nosotros vivamos siempre pegados a Jesús. Jesús no es simplemente una cosita que usted de vez en cuando lo saca del gavetero y lo pone otra vez allí con un cuadrito en una mesita de noche, Jesús es la esencia. Cada día sé que tengo que estar pegadito de Él.
Por eso es que el Señor dijo: ‘Permaneced en mí y yo en vosotros’ y ¿qué? ‘Y llevareis mucho fruto’.
La mujer con el flujo de sangre en medio de una multitud entendió esto y extendió su mano entre la gente y tocó el bordecito, la punta, un hilo del manto de Jesús. Y, ¿qué dice? ‘Salió virtud de él’ Y Él sintió una descarga porque Jesús es como uno de esas maquinarias eléctricas de que están rodeados los vecindarios. ¿Usted ha visto, a veces, esos lugares de electricidad que tienen una malla bien grande alrededor?, y que si usted se mete ahí probablemente sale carbonizado porque esa máquina tiene electricidad. Si usted toca en el lugar inadecuado se le va a pegar a usted. Cristo es una fuente de poder y autoridad. La gente que tiene a Cristo como el centro de su vida, que lo ama, lo imita, lo exalta, usa su nombre como una espada cuando vienen las crisis de la vida: “Señor Jesús, yo confió en Ti”, “Cristo yo me encomiendo a Ti”. ¡Usa el nombre de Jesús!
El nombre de Jesús es una lanza, es una espada, es un proyectil que usted puede enviar contra las crisis de la vida, contra los demonios que quieren atacar su vida…Cristo dice ‘Sin mi nada podéis hacer’.
Esta sociedad necesita cristianos radicalmente comprometidos con Jesús, que no estén por ahí dejando que el diablo quiere que engavetemos a Jesús y que hablemos simplemente de otras cosas. Pero, ¿sabe qué? Es Cristo. No deje que nadie le robe el nombre de Jesús.
Cristo calmó la multitud y dio de comer a través de sus milagros. Calmó la tormenta a través de la palabra, levantó a paralíticos y cojos. Le soltó la boca a los mudos, dio vista a los ciegos. Toda su vida fue acciones de poder y liberación que mostraban que Él era el Hijo de Dios: acciones y palabras.
Y todavía calma la tempestad, todavía da vista a los ciegos, todavía levanta al caído, todavía resucita muertos, todavía liberta de las cadenas del diablo. Todavía hace milagros y los hace en mi vida y los hace a través de mí, también.
La mentalidad sobrenatural es una mentalidad que tiene un apetito de ver la gloria de Dios manifestada. De ver obras de poder y de aprender cómo hacer y llevar a cabo esas obras de poder. Una mentalidad sobrenatural es una mentalidad de hechos, acciones.
Hasta el día en que fue recibido arriba después de haber dado mandamiento por el Espíritu Santo a quienes también después de haber padecido se presentó cómo ‘Vivo’.
Digan todos: “Vivo”. ‘Con muchas pruebas indubitables que no podían ser negadas’. Una de las cosas también de la mentalidad sobrenatural, la importancia de la resurrección de Cristo. El Cristo resucitado. Cristo no se quedó en la tumba, Dios lo levantó de entre los muertos.
¿A dónde tenemos que ir nosotros?. “Señor, ¿a dónde iremos si solamente tú tienes palabras de vida eterna?”. Y cuando se presentan momentos de prueba, sólo podemos ir a una persona y es a nuestro Señor, quien nos habla a través de su Palabra. Cuando logramos desarrollar en nosotros la fe sobrenatural, eso sucede.
Podemos poner la fe en las cosas, en las personas, en las circunstancias, pero también la podemos poner en Dios, que es el que gobierna sobre las cosas, las personas y las circunstancias. Muchas veces, depositamos nuestra fe en las canastas equivocadas. Dios nos dio algo especial, una fe que cuando la depositamos en Jesús, se convierte en una fe sobrenatural que trae cambios en nuestra vida.
Tres consejos para que funcione tu fe sobrenatural:
Primero, puede y debe encontrar la cooperación tuya. Sí está la fe, pero necesita que tú le colabores un poquito, que la pongas a funcionar, que le creas a Dios por las cosas.
La fe sobrenatural requiere de la cooperación tuya. El cojo seguramente dijo: “Bueno, es la oportunidad de mi vida, hoy o nunca".
Segundo, la fe sobrenatural debe canalizarse a través de una persona y esa persona eres tú. Tú vas a dar cuentas de tu fe sobrenatural, y yo de la mía. Porque mi fe lo que puede hacer es influenciar de alguna manera, una fe que tiene que crear un milagro en ti. Pedro sí tenía una fe sobrenatural, y ésta influenció para que el cojo creyera en Jesús.
Tercero, sobre todo para que tu fe obre en lo sobrenatural, recuerda que la fe es por Jesús, nadie más. No hay cosa, situación, personas, no hay nadie más que Jesús. Creer, decidir y tener una fe sobrenatural no depende de Dios; Él ya lo puso en el paquete. Ahora tienes que echarlo a andar, esta es tu oportunidad. En vez de ver lo que no es posible, mira lo que sí, y más allá de lo que tú esperas.
Lo importante que es conocer quién eres y qué posición ocupas en el cuerpo de Cristo. Todos tenemos una función y un lugar específico desde donde podemos actuar para el reino de Dios. Nadie está por casualidad. Aunque no lo percibas, tú tienes un talento especial, un don que te ha sido dado para que cumplas con el plan del Señor.
De igual manera, en el cuerpo de Cristo todos tenemos algo específico para dar. Sin embargo, algunos no lo notan y, por lo tanto, no desarrollan aquello que tienen de parte de Dios y otros, por el contrario, creen que son súper espirituales y se consideran mejores que el resto.
Nos tenemos que ver como Dios nos ve, ni achicarnos ni agrandarnos.
Es importante valorar lo que tenemos y no compararnos con el otro pensando que el regalo que ha recibido del Señor es mejor que el nuestro, ya que de esa manera surgen peleas, competencias y envidias. ¿Hay alguien más visible?, ¿Hay quienes parecen invisibles?. Para Dios nadie pasa desapercibido. Sin importar de dónde vienes, Dios antes de que nacieras ya te había ubicado en un lugar estratégico según Su plan. El Señor ya te conocía y quería usar tu vida de manera asombrosa!
Conclusión
La historia entera de Eliseo nos recuerda que los efectos de una vida virtuosa perduran en obras que siguen aún después de la muerte. La influencia de hombres y mujeres piadosas y espirituales siempre se refleja en la vida de sus contemporáneos como en las de otras personas que nacieron y vivieron después. La vida de Eliseo, este santo hombre de Dios, sus virtudes morales y espirituales, su visión, su fe y acción, son dignas de atesorar y aplicar a nuestras vidas.
Porque si hay un libro en la Escritura que ejemplifica una iglesia viviendo al filo de lo sobrenatural es el libro de los Hechos. Entonces, al nosotros leer el libro de los Hechos y ver cómo esta gente enfrentaba la vida cuando venían situaciones, entendemos que el escritor Lucas era un hombre lleno del Espíritu Santo. Su mentalidad era una mentalidad sobrenatural por la manera como nos lo transmitió en sus escritos. Otra cosa bien importante es que nosotros vivamos siempre pegados a Jesús. Jesús no es simplemente una cosita que usted de vez en cuando lo saca del gavetero y lo pone otra vez allí con un cuadrito en una mesita de noche, Jesús es la esencia. Cada día sé que tengo que estar pegadito de Él.
Por eso es que el Señor dijo: ‘Permaneced en mí y yo en vosotros’ y ¿qué? ‘Y llevareis mucho fruto’.
La mujer con el flujo de sangre en medio de una multitud entendió esto y extendió su mano entre la gente y tocó el bordecito, la punta, un hilo del manto de Jesús. Y, ¿qué dice? ‘Salió virtud de él’ Y Él sintió una descarga porque Jesús es como uno de esas maquinarias eléctricas de que están rodeados los vecindarios. ¿Usted ha visto, a veces, esos lugares de electricidad que tienen una malla bien grande alrededor?, y que si usted se mete ahí probablemente sale carbonizado porque esa máquina tiene electricidad. Si usted toca en el lugar inadecuado se le va a pegar a usted. Cristo es una fuente de poder y autoridad. La gente que tiene a Cristo como el centro de su vida, que lo ama, lo imita, lo exalta, usa su nombre como una espada cuando vienen las crisis de la vida: “Señor Jesús, yo confió en Ti”, “Cristo yo me encomiendo a Ti”. ¡Usa el nombre de Jesús!
El nombre de Jesús es una lanza, es una espada, es un proyectil que usted puede enviar contra las crisis de la vida, contra los demonios que quieren atacar su vida…Cristo dice ‘Sin mi nada podéis hacer’.
Esta sociedad necesita cristianos radicalmente comprometidos con Jesús, que no estén por ahí dejando que el diablo quiere que engavetemos a Jesús y que hablemos simplemente de otras cosas. Pero, ¿sabe qué? Es Cristo. No deje que nadie le robe el nombre de Jesús.
Cristo calmó la multitud y dio de comer a través de sus milagros. Calmó la tormenta a través de la palabra, levantó a paralíticos y cojos. Le soltó la boca a los mudos, dio vista a los ciegos. Toda su vida fue acciones de poder y liberación que mostraban que Él era el Hijo de Dios: acciones y palabras.
Y todavía calma la tempestad, todavía da vista a los ciegos, todavía levanta al caído, todavía resucita muertos, todavía liberta de las cadenas del diablo. Todavía hace milagros y los hace en mi vida y los hace a través de mí, también.
La mentalidad sobrenatural es una mentalidad que tiene un apetito de ver la gloria de Dios manifestada. De ver obras de poder y de aprender cómo hacer y llevar a cabo esas obras de poder. Una mentalidad sobrenatural es una mentalidad de hechos, acciones.
Hasta el día en que fue recibido arriba después de haber dado mandamiento por el Espíritu Santo a quienes también después de haber padecido se presentó cómo ‘Vivo’.
Digan todos: “Vivo”. ‘Con muchas pruebas indubitables que no podían ser negadas’. Una de las cosas también de la mentalidad sobrenatural, la importancia de la resurrección de Cristo. El Cristo resucitado. Cristo no se quedó en la tumba, Dios lo levantó de entre los muertos.
¿A dónde tenemos que ir nosotros?. “Señor, ¿a dónde iremos si solamente tú tienes palabras de vida eterna?”. Y cuando se presentan momentos de prueba, sólo podemos ir a una persona y es a nuestro Señor, quien nos habla a través de su Palabra. Cuando logramos desarrollar en nosotros la fe sobrenatural, eso sucede.
Podemos poner la fe en las cosas, en las personas, en las circunstancias, pero también la podemos poner en Dios, que es el que gobierna sobre las cosas, las personas y las circunstancias. Muchas veces, depositamos nuestra fe en las canastas equivocadas. Dios nos dio algo especial, una fe que cuando la depositamos en Jesús, se convierte en una fe sobrenatural que trae cambios en nuestra vida.
Tres consejos para que funcione tu fe sobrenatural:
Primero, puede y debe encontrar la cooperación tuya. Sí está la fe, pero necesita que tú le colabores un poquito, que la pongas a funcionar, que le creas a Dios por las cosas.
La fe sobrenatural requiere de la cooperación tuya. El cojo seguramente dijo: “Bueno, es la oportunidad de mi vida, hoy o nunca".
Segundo, la fe sobrenatural debe canalizarse a través de una persona y esa persona eres tú. Tú vas a dar cuentas de tu fe sobrenatural, y yo de la mía. Porque mi fe lo que puede hacer es influenciar de alguna manera, una fe que tiene que crear un milagro en ti. Pedro sí tenía una fe sobrenatural, y ésta influenció para que el cojo creyera en Jesús.
Tercero, sobre todo para que tu fe obre en lo sobrenatural, recuerda que la fe es por Jesús, nadie más. No hay cosa, situación, personas, no hay nadie más que Jesús. Creer, decidir y tener una fe sobrenatural no depende de Dios; Él ya lo puso en el paquete. Ahora tienes que echarlo a andar, esta es tu oportunidad. En vez de ver lo que no es posible, mira lo que sí, y más allá de lo que tú esperas.
Lo importante que es conocer quién eres y qué posición ocupas en el cuerpo de Cristo. Todos tenemos una función y un lugar específico desde donde podemos actuar para el reino de Dios. Nadie está por casualidad. Aunque no lo percibas, tú tienes un talento especial, un don que te ha sido dado para que cumplas con el plan del Señor.
De igual manera, en el cuerpo de Cristo todos tenemos algo específico para dar. Sin embargo, algunos no lo notan y, por lo tanto, no desarrollan aquello que tienen de parte de Dios y otros, por el contrario, creen que son súper espirituales y se consideran mejores que el resto.
Nos tenemos que ver como Dios nos ve, ni achicarnos ni agrandarnos.
Es importante valorar lo que tenemos y no compararnos con el otro pensando que el regalo que ha recibido del Señor es mejor que el nuestro, ya que de esa manera surgen peleas, competencias y envidias. ¿Hay alguien más visible?, ¿Hay quienes parecen invisibles?. Para Dios nadie pasa desapercibido. Sin importar de dónde vienes, Dios antes de que nacieras ya te había ubicado en un lugar estratégico según Su plan. El Señor ya te conocía y quería usar tu vida de manera asombrosa!
Conclusión
La historia entera de Eliseo nos recuerda que los efectos de una vida virtuosa perduran en obras que siguen aún después de la muerte. La influencia de hombres y mujeres piadosas y espirituales siempre se refleja en la vida de sus contemporáneos como en las de otras personas que nacieron y vivieron después. La vida de Eliseo, este santo hombre de Dios, sus virtudes morales y espirituales, su visión, su fe y acción, son dignas de atesorar y aplicar a nuestras vidas.
PASTOR
ASCANIO OSORIO
Diciembre 31 DE 2010
Diciembre 31 DE 2010
Como puedo recomendar esto a otros por la red?
ResponderEliminaramen una palabra poderosa y de gran bendición para el pueblo,me gozo mucho al ver las obras sobrenaturales que Dios esta haciendo en este dulce refugio El Todo Poderoso les continue bendiciendo besos y abrazos para todos los recuerdo con mucho cariño.
ResponderEliminarHermano Franklin, debajo del artículo hay unos botones que le permiten a usted compartir el artículo con redes sociales como Facebook, Twitter y también enviarlo a otros contactos a través del correo electrónico. Espero que esto le ayude!
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