jueves, 19 de abril de 2012


LA DUDA: ENEMIGA DE LA VISIÓN


Ayer consideramos el primer enemigo de la visión: los afanes. Dijimos que estos hacen desviar nuestra atención de la meta. Hoy hablaremos de un enemigo terrible, no sólo de la visión, sino de cualquier aspecto de la vida cristiana, como es la duda.

La duda es un gran peligro, pues nos hace pensar que no somos capaces o no estamos preparados para cumplir el propósito del Señor, nos quita la seguridad con la cual debemos actuar en la obra, nos infunde temor de ser rechazados al llevar la Palabra de Dios y es una de las armas más eficaces que utiliza Satanás para privarnos de alcanzar las promesas de Dios.

Cuando vengan a tu vida sentimientos de duda debes recordar que Él mismo, nuestro Señor JESUCRISTO, es quien nos ha escogido para ser parte fundamental de su visión, por tanto no debemos tener. Si Él nos ha llamado, Él mismo nos respaldará. Nuestro Padre nos ha dado su ESPÍRITU SANTO, mediante el cual recibimos poder para hacer su obra, de manera que podamos hablar con denuedo y valentía. 

No mires tus propias limitaciones, mira al DIOS TODOPODEROSO quien no conoce limitación ni derrota.

Medita acerca de estas citas de la Biblia:

Juan 15:16
"No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé."

Lee también lo siguiente:

Hechos 1:8
"pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra."

Hebreos 10:39
"Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma."

Otras citas importantes:
Lucas 5, Juan 14:1

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