LA GRATITUD: CUALIDAD DEL CREYENTE
Como dijimos ayer, la gratitud es fundamental para el creyente. La Biblia está llena de textos que nos invitan a dar gratitud a Dios, en otras palabras, a alabar a Dios por lo que el ha hecho y está haciendo en nosotros. El libro que sin lugar a dudas nos habla más de la gratitud a Dios es el libro de los Salmos. David, el autor de muchos de estos salmos, constantemente nos habla de dar gracias, reconocer y exaltar a Dios, reconociendo que es la fuente de todo, comenzando por la vida misma.
Una manera excelente de estimular la alabanza a Dios, es la de traer a memoria sus hechos poderosos, no sólo aquellos que están registrados en la Biblia, sino aquellos que Él ha hecho en nuestra propia vida. La bendición de un hogar, de nuestros padres, una meta educativa o laboral alcanzada, la compañía de buenos amigos, una sanidad milagrosa, en fin, tantas cosas que a diario el Señor trae a nuestras vidas se convierten en razones para alabarle.
A continuación, algunos ejemplos en la Biblia de alabanza a Dios:
Y bendiga todo mi ser su santo nombre.
Bendice, alma mía, a Jehová,
Y no olvides ninguno de sus beneficios.
El es quien perdona todas tus iniquidades,
El que sana todas tus dolencias;
El que rescata del hoyo tu vida,
El que te corona de favores y misericordias;
El que sacia de bien tu boca
De modo que te rejuvenezcas como el águila."
Salmo 103:1-5
Y seré salvo de mis enemigos."
2 Samuel 22:4
de su santidad."
Salmos 97:12
No hay comentarios:
Publicar un comentario