¿DE DÓNDE VENGO?
Descubriendo nuestra identidad
Para tratar el tema de nuestra verdadera identidad es necesario saber de dónde venimos, lo que éramos sin Cristo y lo que ahora somos en Él si hemos aceptado su regalo de salvación a través del arrepentimiento y nuestra una nueva fe.
Si hemos recibido a Jesús, entonces debemos recordar que antes vivíamos en una vida de pecado, alejados de Dios debido a nuestra propia desobediencia. Antes de conocerle nuestra única meta en la vida era la de satisfacer nuestros propios deseos y voluntad, sin tener en cuenta la perfecta voluntad de Dios expresada en su Palabra.
Lo anterior nos ayudará a darnos cuenta que precisamente nuestra nueva identidad en Dios debe ser obligatoriamente contraria a nuestra vieja identidad. Es decir, ahora todo nuestro pensamiento, voluntad y acciones deben estar encaminadas en agradar a Dios y hacer su voluntad por amor. Es en ese momento cuando comenzamos a vivir una vida de victoria y libertad, empezando también a revelarse nuestra nueva naturaleza en Cristo, nuestra identidad cada vez más parecida a la del Señor.
Ahora que conoces cuál es tu nueva identidad, mañana descubrirás cuál es el propósito que de ahora en adelante debes tener en esta nueva vida. Consideremos los siguientes pasajes de las Sagradas Escrituras:
"entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás."
Efesios 2:3
"como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia;
sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir;"
1 Pedro 1:14-15
"Porque todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas."
1 Tesalonicenses 5:5
No hay comentarios:
Publicar un comentario