DEVOCIONAL JUNIO 29 DE 2012

IDENTIDAD CON UN PROPÓSITO

Hasta ahora hemos analizado la identidad que debemos tener, es decir, el ADN de Cristo, la nueva naturaleza espiritual adquirida por medio de la fe en el Señor. Pero ahora es necesario tener en cuenta que la identidad también revela nuestro propósito y finalidad en la vida, pues según sea nuestra naturaleza, o sea, lo que somos, así también van a ser los frutos que produzcamos. El Señor Jesucristo nos dijo que el árbol se conoce por sus frutos. No se le puede pedir a un árbol de manzanas que de peras, del mismo modo alguien que tiene la vieja identidad de pecado no se le puede pedir que sus frutos sean buenos, pero sí a aquel que ha recibido la identidad de Cristo, del cual se espera que su obrar sea correcto, acorde a la voluntad de Dios expresada en su Palabra.

El propósito definido por nuestra nueva identidad es el de agradar a Dios en cada momento, esto implica no sólo vivir una vida de santidad y amor, sino también el propósito de compartir con otros la bendición de haber recibido la salvación que Cristo ofrece. Predicar el Evangelio, las buenas nuevas de salvación a toda persona. Haciendo esto es que realmente nos podemos sentir realizados, ya que estaremos cumpliendo el plan por el cual fuimos salvados.

Una vida llena de la identidad de Cristo será una vida llena de los frutos del Espíritu Santo.

Veamos los siguientes textos de la Biblia:

"todos los llamados de mi nombre; para gloria mía los he creado, los formé y los hice."

Isaías 43:7

"Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas."

Efesios 2:10

"Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?

Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos.

No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos.

Mateo 7:16-18

"dice: Poco es para mí que tú seas mi siervo para levantar las tribus de Jacob, y para que restaures el remanente de Israel; también te di por luz de las naciones,(A) para que seas mi salvación hasta lo postrero de la tierra."

Isaías 49:6